Mariposas en tu piel...

“Déjame tocarte, dibujare cada momento hasta el fin,
siempre intensamente, en tu desnudez...
soy capaz de todo por ti, y no se si te tengo,
eres frío y calor... siempre igual, siempre igual...
otra vez, tócame el alma...
solo... tócame...
otra vez, como tu sabes hacerlo,
solo... tócame...
puedes seducirme, hacer que caiga rendido a tus pies
puedes ignorarme, y hacerme enloquecer...
pero esta noche nada es igual, es un matiz de ternura...
guárdate por siempre así, kédate por siempre así...
otra vez... tócame el alma,
solo... tócame...”

CODA – Tócame el alma

Mis manos... mariposas nocturnas, mariposas diurnas y celestes... mariposas que se posan en tu piel y que te encantan... siempre te han llamado a tus ojos y no puedes dejar de verlas...

Revolotean cerca de ti, no pueden evitar tocarte y hacerte sentir esa gran sensación eléctrica que tanto te gusta...

No dejas de sentir gusto... no dejas de adorar que te toquen suavemente y te hagan sentir como te desvaneces por las noches... no dejas de anhelar mis manos cuando lejos estamos y las horas inclementes pasan sin tocarte...

Mis manos te encantan... mariposas traviesas hechas sólo para ti. Te encantan mis manos, pero tu a ellas, les fascinas...

no puedo alejar mis manos de ti...