Sunday, August 15, 2010

Ayuda desde las alturas... y desde donde se pueda!!!

A veces no queda más remedio, tenemos que pedir ayuda. No es algo vergonzoso, reconocer que no puedes solo con algo y pedir apoyo es un signo de fortaleza y crecimiento... 

A veces pedimos a lo que es más sagrado para nosotros... miramos al cielo y pedimos la ayuda que necesitamos... personalmente siempre le doy guerra a los dioses, a Buda y no molesto al Señor porque seguramente anda muy ocupado con los demás y él y yo nos entendemos. Complicado, sí... igual que yo. 

A veces no es suficiente invocar a lo más sagrado para nosotros... nuestra fé, nuestra esperanza, nuestra fuerza puede alterarse, extraviarse... que hacemos o que podemos hacer cuando las cosas no dependen de nosotros, sino de los demás?? Cómo puedes ayudar a quien amas si no hay manera de hacerlo porque no está en tus manos el problema??

A veces quisiera salir corriendo, pero esa no es opción ahora; a veces quisiera una oportunidad más con mis ancestros... concretamente quiero invocar a mis abuelos Dragón. Mamá Olga y mi Abuelo Rubén, los padres de Mamá Dragón... ellos sabrían que hacer con todos los "pequeños" graves problemas que ahora pasa mi pekeña familia y sería un alivio conocer su opinión, escuchar su consejo y que reconfortaran a mis padres. Me encantaría ese diminuto deseo... 

Esta noche no invoco al dragón o a los dioses de las alturas... tampoco será por una noche, sino por todas las necesarias hasta que Mamá y Papá Dragón encuentren la respuesta que buscan y resuelvan lo que les aqueja... Ahora invoco a mis Abuelos Dragón, que ellos apoyen y velen por mis padres, por mi pekeña familia e iluminen el camino que deben seguir mis padres que ahora también son abuelos y por eso pasan por un momento triste que deben enfrentar y superar. 

Mamá Olga, Abuelo Rubén, dondequiera que estén, por favor ahora atiendan a mis padres, visítenlos, aconséjenlos y reconfórtenlos... Ellos siempre siguen sus enseñanzas, los recordamos con amor y desearíamos tenerlos un rato en casa para mil cosas... por favor les encargo su guía y no permitan que nadie siga lastimándolos; pongan orden donde ahora no tengo oportunidad de actuar ni participar como kisiera. Los amamos con todo el corazón y sé que acudirán a este llamado desesperado de auxilio... 
Me siento tan atado de manos...

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