"... have you ever needed someone so bad...
have you ever wanted someone... you just couldn't have,
did you ever tried so hard... that your world just fell apart,
did you ever needed someone soo baad..."
DEF LEPPARD Have you ever needed someone so bad
Leyendo una frase en la red, me puse a reflexionar en ella, decía “al final, las cosas siempre están bien, y si las cosas no están bien es porque entonces no es el final”; quizás se relaciona con aquella canción de Lora que dice “no siempre las cosas son como deberían ser...” –Pobre Soñador-. Además vi otra frase que decía que la gente no debe ser buena todo el tiempo, solo debe ser buena cuanto tenga que serlo, cuando realmente valga la pena; ojalá pudiera reconocer esos momentos y demostrarme de que soy capaz.
Estando en mi habitual sesión de Outónterapia –es esa manía que me transmitió una gran amiga, la cual te da por escuchar música que te llega de tal manera que sufres un poco al escucharla, te gusta ese sentimiento y por mas que haces sigues torturándote a ti mismo con dicha música- pongo mi mente a divagar en un sinfín de cosas que siempre terminan recordándome a Mirta, y en pocas ocasiones me recuerdan a otras mujeres –como el amor de mi vida o cierta güerita de mis 16-, pero todo termina invariablemente en ella; después le pude decir que ella se convirtió en una etapa de mi existencia en el primer pensamiento que tenía al despertar y en el último cuando me iba a dormir. Me agrada levantarme pensando en ella y pensar que ella quizás todavía piensa en mi y me extraña un poco.
Sé que es importante y hasta tanto sano el no quedarse con los sentimientos y decirlos, que caso tendría que yo le dijese ahora o varios años después, que la amé, que estaba –y quizás lo sigo- loco por ella, que hubiera dejado que por ella me comiera una boa, que ella es muy importante en mi vida, que es la espuma de mi chocolate, en fin, que todo lo que hago lo hago por ella; vuelvo a tener esa sensación de que si lo hago voy a terminar con una bella amistad y quizás no vale la pena hacerlo, aunque pensando de nuevo en lo que ella solía decirme en la perseverancia y en que arriesgarse es mejor que no hacerlo, yo siempre he pensado que lo mejor y mas bonito de la vida es agarrar al toro por los cuernos y no soltarlo hasta que uno de los 2 se rinda –confieso que pocas veces he visto unas astas de tal magnitud- sigo escuchando música y pienso en su sonrisa, en todo lo que no le he dicho y en lo que ya le dije; he pensado una y otra vez en repetirlo, en como he soñado que la beso y no me rechaza o golpea, en como anhelo tenerla entre mis brazos y no dejarla ir. Y ella solo necesita escuchar lo que yo no le puedo decir.
Cuando se encuentra una persona así es obligación humana tomarla y jamás dejarla ir a menos que tenga uno atole en las venas, lo cual desde mis 16 años comprobé que no tengo, Mirta me deshace con solo una sonrisa. Además, ella tiene la virtud que no he encontrado en otras mujeres –es difícil encontrar una virtud así- de que me motiva a hacer las cosas, algo que a ella no le agrada mucho hacer en un hombre, pero no ha comprendido que los hombres grandes siempre han tenido una gran motivación y que mejor motivación que ella para cualquier mortal como yo; lo dicho, ella logra moverme, motivarme, pero hasta ahora no le he dedicado nada de logros a ella, solo parte de mi. No puedo ayudarla si no estoy bien, y esa pequeña frustración de no lograr lo que pienso, de quedarme en ese casi, es lo que me impide ayudarla como ella necesita; a veces pienso que solo le estorba que yo la ame.
Ella tiene una gran cantidad de defectos, así como todos los tenemos, no vale la pena decirlos ya que yo solo veo mas virtudes que defectos en su persona, ya se que la veo con ojos de amor, pero todo lo que tocamos es efímero, no hay que aferrarse a nada; solo soltando lo que queremos es como podemos tenerlo. Los defectos solo afectan a los demás si así lo quieres, y en principio te enamoras hasta de ellos. A veces somos tan egoístas que nos negamos a soltar o terminar con eso que nos hace daño o que tanto queremos y le hacemos daño; te pido me disculpes si en alguna ocasión te hice daño, jamás lo hice con esa intención nena.
Mirta nunca me entendió que ella a lo mejor se consideraba solo una persona más en el mundo, pero ella para este pobre Gato fue el mundo; la amo no solo por quien es, sino por quien soy cuando estoy con ella, hace salir la mejor parte de mi ser. Pero no solo soy mejor por ella, soy mejor porque así lo quiero y pensando en ella siento que puedo hacer lo que sea, y así la sigo queriendo.
La parte que mas me agrada de mi persona es aquella que nunca se rinde por mas difícil que sea una situación, eso lo tomé de varios años de intentar las cosas; creo que ella tiene gran parte de la culpa de esa parte de mi, ella solía decirme que no me diera por vencido, que no dejara que el mundo me comiera que yo debía ser quien se comiera al mundo, ahora sorprendentemente ella me dice que se ha dado por vencida, que se rinde, mi musa cayó pero se que siempre se levantará, así como yo me he de caer y levantar muchas veces para conseguir lo que busco, ella lo hará, porque no me fijo yo en cualquier mujer, y si me fijé en ella es porque Mirta puede hacer cualquier cosa. Caerse y levantarse para ella es algo simple, y así debería ser para las personas, no rendirse y continuar con lo que se quiere, como decían los Beatles: all you need is love.
A veces la gente piensa que darse por vencido y no rendirse vienen a ser lo mismo o del mismo lugar; no lo creo, hay situaciones y cosas en las cuales no es bueno no darse por vencido, es decir, hay veces en que debemos ceder para evitar lastimarnos o lastimar a quienes queremos, y hay situaciones en las cuales no debemos nunca darnos por vencidos, pero siempre hay que saber cuando dejar en paz las cosas, para posteriormente volver a insistir en ellas. Eso fue lo que me pasó con ella, tiempo atrás me había despedido de ella, no quería volver a verla ni saber de ella, fue entonces que se convirtió en mi demonio amado, y ahora que la vuelvo a encontrar en mi camino, entiendo que debo hacer algo con ella y finalmente volver a insistir con ella, decirle que la amo y lo que siento por ella, si me acepta muy probablemente seremos felices el tiempo que nos dure el chiste; de lo contrario, mi tarea para con ella y mi actuación en su vida quizás concluyan con el tiempo, y al menos, no me di por vencido y morí en el intento, tomando al toro por los cuernos.
Hoy se que ya no vale la pena seguir una lucha sin sentido, tengo que aprender a rendirme y reconocer que hice lo mejor que pude, sin reprimirme que si ese fue mi mejor esfuerzo entonces no fue suficiente; no es cierto. “A veces siento que estoy golpeando un caballo muerto y no se que es lo que me deprime... pero después sonreiré.”
